La familia Recabarren González

Elrodriguista. 29 abril 2020.

En el año 1976 la DINA, la agencia de seguridad de la dictadura encomendó a sus agentes la detención de los militantes del Partido Comunista que se encontraban participando de la organización en la clandestinidad. El objetivo era la desarticulación de las células de militantes como la directiva central que estaba en la clandestinidad. Los agentes fueron deteniendo uno a uno a los militantes, tal como pasó en el caso de la familia Recabarren González. Luego de algunos días fueron detenidos los miembros del Comité Central del Partido Comunista en la clandestinidad en el caso llamado Calle Conferencia, donde se detuvo al Secretario General del partido Víctor Díaz López.

 El 29 de abril de 1976 fue detenida Nalvia Rosa Mena Alvarado, casada, un hijo, embarazada de tres meses, dueña de casa, militante de las Juventudes Comunistas. Se detuvo además a su cónyuge Luis Emilio Recabarren González, técnico gráfico, exdirigente sindical, su cuñado Manuel Guillermo Recabarren González, casado, dos hijos, gásfiter; ambos militantes del Partido Comunista. Los autores de la detención eran agentes de la DINA que montaron un operativo en el sector de calle Sebastopol con la avenida Santa Rosa. Cuando detuvieron al matrimonio Recabarren Mena, fue detenido el hijo de ambos Luis Emilio Recabarren Mena, de dos años y medio de edad, los agentes lo dejaron luego en la calle cerca de la casa de sus abuelos. 1​

Al día siguiente 30 de abril Manuel Segundo Recabarren Rojas, casado, seis hijos, jubilado, exdirigente sindical gráfico, militante del Partido Comunista, fue detenido por agentes de la DINA. Había salido de su hogar para denunciar la detención de sus hijos y nuera. La dictadura negó la detención de los afectados. Según constan declaraciones del 14 y 17 de julio de 1976 de la División Nacional de Comunicación Social, (DINACOS), donde se señaló que tras operativos realizados por los servicios de seguridad se había logrado desbaratar treinta y dos casas-buzones del Partido Comunista, que servían de enlace entre la Dirección Nacional de dicho partido y sus Comités Regionales. Además de la detención de militantes comunistas, se agregaba que no se podían entregar más antecedentes a fin de no entorpecer las investigaciones que se realizaban. 1​

Del muro de Julián Valdés Recabarren

27 de abril a las 13:07

“A eso de las 18:30 hrs. Llega de visita nuestro sobrino Manuel, al cual cariñosamente la familia lo llamaba mañungo, era una de las tantas visita que nos solía hacer, tomamos once y conversamos de la familia, de lo que estaba sucediendo en el país.
Mañungo estaba preocupado, nos contó que sentía que los estaban siguiendo, y que estaban siendo vigilados, que desde hace un tiempo estaba con esa sensación y que le preocupaba que esto estuviera sucediendo a su hermano y por ende a los demás compañeros.
A mi vieja y a mí nos llamó la atención su estado de ánimo, no era común en el. Le expresamos nuestra preocupación, debido a que ya sabíamos de detenciones de compañeros en su mayoría del partido que estaban en clandestinidad.
Le pedimos que se cuidara, y le ofrecimos que se quedara en casa por esa noche, pues ya era tarde y por su seguridad. El nos dijo que no, que debía saber de su familia y de su hermano que prefería irse. Ya eran más de las 22 horas
Se despidió afectuosamente cómo siempre lo hacía, nos quedamos con la angustia, le pedimos que se cuidara…, desde ese día no lo vimos nunca más.
Mi vieja quedo con la sensación que Manuel había venido a despedirse de nosotros.
Para mi esposa fue un mazazo en su cabeza, la detención y desaparición de su hermano y sobrinos, nunca logro recuperarse de esa pena. En las noches, como una premonición se despertaba al escuchar los ruidos de avión y me decía, viejo no serán los milicos que llevan ahí a mi hermano y los chiquillos no serán que estos milicos desgraciados los van a lanzar al mar… y rompía en llanto…todo el dolor sufrido dio inicio a su temprana partida, nos dejo teniendo 38 años Natalia Recabarren mi amada esposa.
Testimonio: del Tío Julián.

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